EDUCACIÓN CLÁSICA

La educación clásica es un modelo de instrucción K-12 que tiene sus raíces en las artes y las ciencias liberales, ofrece una base sólida en la virtud cívica y cultiva el carácter moral:

Enfatiza la centralidad de la tradición occidental en el estudio de la historia, la literatura, la filosofía y las bellas artes.

Presenta un examen rico y recurrente de las tradiciones literarias, morales, filosóficas, políticas e históricas estadounidenses para preparar a los estudiantes para la ciudadanía.

Su plan de estudios es equilibrado y sólido en las cuatro disciplinas básicas de matemáticas, ciencias, literatura e historia, con instrucción fonética explícita que conduce a la fluidez en la lectura e instrucción gramatical explícita que conduce al dominio del idioma.

Los maestros bien educados y articulados son fundamentales para el salón de clases, en contraste con los modelos convencionales de "aprendizaje centrado en el estudiante".

La cultura escolar exige virtud moral, decoro, respeto, disciplina y estudiosidad entre los estudiantes y el profesorado, y al mismo tiempo produce un espíritu de asombro y un deseo de saber qué es bueno, verdadero y bello.

Características clave de la Academia Highlands

Highlands Academy se compromete a adoptar y defender las siguientes características clave:

Un plan de estudios rico en contenido, equilibrado y sólido en las cuatro disciplinas de matemáticas, ciencias, literatura e historia.
Instrucción en la tradición occidental a través de la historia, la literatura, la filosofía y las bellas artes.
Estudio de las tradiciones literarias, morales, filosóficas, políticas e históricas estadounidenses.
Instrucción explícita en fonética y gramática.
El estudio del latín como requisito para todos los alumnos.
Un enfoque de la instrucción que reconoce estándares objetivos de corrección, lógica, belleza, peso y verdad.
Una facultad bien educada y articulada que utiliza métodos de instrucción tradicionales dirigidos por maestros.
Un compromiso de usar la tecnología de manera efectiva sin disminuir el liderazgo de la facultad que es crucial para el rendimiento académico.
Un plan para servir a los grados K a 12 (se abrirá con menos grados agregando un grado cada año) para brindar continuidad y un examen recurrente de materias a lo largo de la carrera de un estudiante.
Una cultura escolar de virtud moral, decoro, respeto, disciplina y estudio entre los estudiantes y el cuerpo docente.

Un curso de estudio completo

Los estudiantes recibirán una educación integral en artes liberales y ciencias. Todos los estudiantes estudian literatura y matemáticas, historia y ciencias, bellas artes, latín y educación física porque los años K-12 son los años en los que aún nos estamos conociendo a nosotros mismos y al mundo que nos rodea. El desarrollo exitoso de la lectoescritura y la aritmética y una base sólida en las materias básicas es necesario antes de una formación y estudios avanzados o especializados.

Arraigado en la naturaleza humana

Pero el estudio de las artes liberales hace más que preparar el camino para una formación especializada. Una educación clásica nos enseña a buscar el conocimiento de la naturaleza de las cosas, especialmente la naturaleza del hombre y del universo como un todo. Los seres humanos son esa parte del universo que busca saber dónde nos encontramos dentro de él, y que se preguntan acerca de sus orígenes y carácter últimos. También nos mueve el deseo de conocernos a nosotros mismos, de entender nuestra naturaleza y propósito en la vida.

Las Humanidades y las Ciencias

Las guías más seguras para esta búsqueda son las grandes obras de literatura, filosofía, política y arte que ha producido la humanidad, que nos enseñan sobre la naturaleza humana y el bien humano, junto con el estudio serio de las matemáticas y las ciencias, que nos enseñan sobre el orden natural Junto con el estudio de la historia, que nos enseña a conocernos a nosotros mismos mediante la comprensión de nuestro lugar en el desarrollo de la historia humana, la búsqueda seria del conocimiento en todos los temas nos equipa para una vida plenamente humana.

La educación clásica nos libera en el sentido verdadero. Nos libera de la ignorancia y la confusión, del prejuicio y el engaño, y de las pasiones salvajes y las esperanzas fantasiosas que pueden degradarnos y destruirnos. Libera haciéndonos racionales, permitiéndonos ver el mundo con claridad y honestidad. Al revelar nuestra naturaleza, necesariamente revela lo que necesitamos por naturaleza: lo que es correcto y bueno para nosotros.

Formación Moral

Por estas razones, la educación clásica proporciona, en parte, educación moral. En lugar de violentar la naturaleza humana en un vano intento de rehacerla, la educación clásica cultiva la naturaleza humana para que pueda crecer adecuadamente y florecer. Al enseñar a los alumnos a cultivar la virtud moral, nos guía hacia la libertad haciéndonos autosuficientes y responsables, capaces de gobernarnos a nosotros mismos y participar en el autogobierno de nuestras comunidades.

Educación cívica y patriotismo reflexivo

La búsqueda seria de una educación clásica nos muestra que la vida de la mente y la existencia de la educación misma dependen de la existencia de la civilización, sin mencionar el orden político, la seguridad y la libertad de pensamiento. Un estudio reflexivo de la historia nos muestra lo difícil que es lograr estos bienes, nos da una apreciación de lo raras y preciosas que son nuestras propias circunstancias estadounidenses, y nos muestra lo importante que es preservarlas.

Al estudiar los orígenes de nuestro país y su historia, en todos sus triunfos y tragedias, los estudiantes adquieren un amor maduro por América, que aprecia nuestra fundación sin precedentes, producto de la reflexión y la elección, y mide la salud de nuestra república a la luz de las normas establecidas en nuestros documentos fundacionales. A partir de ese conocimiento, nos convertimos en ciudadanos capaces de juzgar correctamente lo que se debe conservar y lo que se cambia, y al hacer este juicio cumplimos una parte central de nuestra naturaleza humana, convirtiéndonos en ciudadanos libres.